sábado, octubre 29

Cambio de reglas

SOCIEDAD

Avisamos a las compañías discográficas, las compañías de software, las compañías de medicamentos, las de cablevisión y cualquier otra compañía que comercializa los derechos de autor de sus empleados o de terceros, que las reglas están cambiando. Sus managers y directores todavía pretenden encarcelar a algunos inocentes con la intención de "dar una lección" a la sociedad, reflejo aleccionador proveniente de generaciones pasadas y expresión de impotencia inconciente frente al inevitable cambio de reglas que se avecina.

Compañías como Sony se encuentran sumidas en una paradoja excepcional: ellos fabrican las regrabadoras de CDs con los que la gente les "roba" los discos a su discográfica, y ellos fabrican las computadoras con la habilidad de armar redes espontáneas a lo ancho del planeta que le permiten a la gente intercambiar la música que su discográfica pretende vender. Sí, la esquizofrenia es hermosa cuando se la contempla desde afuera. En este caso tiene su origen en la ignorancia de los directivos de Sony y de otras compañías de lo que sus propias empresas están contribuyendo a cambiar. El problema es que no sólo los directivos, sino tampoco los empleados, ni nadie en el mundo sabe bien hacia dónde van las cosas.

La inteligencia humana trabaja con la abnegación de un soldado para desarrollar la tecnología, pero la voluntad que la impulsa y el sentido que le imprime trasciende a cualquiera de nosotros, ya que está conformado por la totalidad del conjunto humano bajo la forma de un combate o danza entre el Mercado, los Interpretadores (gerentes de marketing), los Valores y otras fuerzas parapsicológicas. Toda estrategia humana es limitada si se la compara con el efecto más profundo que la tecnología causa en el futuro. Los pensadores humanos más avanzados apenas pueden limitarse a lanzar pronósticos cercanos y nadie conoce al monstruo que nos lleva cabalgando por el cosmos a 300 mil kilómetros por segundo.

Por eso concretamente, los directivos de las discográficas comprenderán o bien cuando ya no tenga sentido seguir encarcelando a la gente, o bien un poco antes, que les toca a ellos proponer algo distinto. El mercado debe moverse por el deseo de la gente, no por el miedo. Pueden optar por el clásico truco de "dar valor agregado al producto" o lo que sea. De todas formas también es posible que dentro de un tiempo se abola el comercio como lo conocemos.

En cuanto a encarcelar a la gente, en algún momento un abogado se dará cuenta de que una multinacional que le hace un juicio a un ciudadano del tercer mundo está cometiendo cierto abuso de poder, y que de ninguna manera una empresa como Microsoft, con una de las mayores facturaciones del mundo, puede considerarse perjudicada porque los pobres del mundo no hayan invertido 600 dólares en sus sistemas medianamente operativos.

Eso es todo por ahora. Muchas gracias.

2 comentarios:

explorador54 dijo...

¿Y qué decir del caso de Roche, que pone condiciones para entregar la patente de su medicamento contra la gripe aviar?

http://tinyurl.com/czd5y
http://tinyurl.com/84got

explorador54 dijo...

Tal vez Google esté indicando el camino, con su filosofía de no cobrar por productos o servicios que sea capaz de ofrecer gratis.

Las editoriales que siguen aferradas a las viejas reglas se quejan a Google por su nuevo servicio Google Print (print.google.com), que permite hojear libros a través de Internet.

Cuando no les quede más remedio, seguramente comprenderán.