EUFEMISMOS y ALIENACION
Si no tomamos como burlas ciertas expresiones cada día más comunes de las empresas grandes es porque las consideramos condescendientemente como fenómenos culturales inofensivos (o idiotismos, como llaman algunos lingüistas a otra cosa). Veamos la explicación que da Epson para su producto (virtual) CoverPlus:
"EPSON COVERPLUS es un servicio opcional de extensión de la garantía EPSON, concebido para ofrecer una flexible y amplia asistencia sobre todos los productos EPSON. Permite a los clientes optar por prorrogar y potenciar la garantía estándar disponible junto con el producto, con el fin de obtener una cobertura adicional si el equipo presentase cualquier avería. EPSON COVERPLUS cubre un plazo de dos o tres años a partir de la fecha de compra, tiempo durante el cual los clientes pueden estar seguros de que EPSON asegurará (sic) que su producto permanece listo y en marcha."
Si pasamos por alto el eufemismo y el barroco, lo que Epson plantea en términos concretos es que si uno pretende estar seguro de que su producto funcionará por lo menos dos o tres años, deberá realizar un pago extra. Cualquier adulto recordará con cierta nostalgia aquellas antiguas máquinas de escribir que han funcionado por decenios y decenios sin necesidad de llevarlas a reparar. La calidad ahora es inferior, o dicho de otro modo, se presume que una persona o empresa actualizada deberá comprar un nuevo Microsoft Word cada cuatro años cuando sale una versión nueva, junto con un nuevo Microsoft Windows y una nueva PC, así como una nueva cámara digital y una nueva impresora. Cada usuario va financiando el progreso tecnológico que lo obnubila (desde el lenguaje con palabras como "potenciar la garantía") mientras se hunde en una nube de pedos y vive alienado con los ojos fijos en su celular sin importarle que a su alrededor asesinen a la gente o no le den el asiento a una mujer embarazada.
Mientras tanto, Epson asegura que "su presencia en casi todo el mundo [la de Epson] permite a SEIKO EPSON CORP. ofrecer a sus clientes no sólo la seguridad de que en el futuro contarán con el respaldo de un fabricante líder sino que, además, les permite participar en los frutos de sus avances mundiales". ¿Acaso nos regalarán acciones de la empresa?
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4 comentarios:
Lo que pasa es que las empresas ya no nos venden productos: nos venden "impresiones" de sus productos, como sombras corpóreas que desaparecen al poco tiempo. Ilusiones volátiles que se pueden tocar y usar por un instante, cada vez más poderosas, más caras y más fugaces. Por adentro también, un chip es apenas un dibujo. Estamos desapareciendo poco a poco, ¿saben?
No sé si captamos el mensaje en su totalidad, ¿pero acaso nosotros mismos somos algo más que una composición fugaz y momentánea de materia? ¿Acaso somos algo más que un dibujo animado?
No...
Bueno.
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