El que sigue es el texto que el propio Abelardo* escribió mientras se encontraba en trance.
Día: xxx Hora: xxx Tensión: xxx PH: xx Técnica: xxxx
Los encontré. Tú crees?
Me siento como si estuviera loco.
Soy todos ellos! Estás seguro?
Sí, claro. Acaso hay alguien más que yo en esta habitación?
No, claro. Y entonces, por qué haces ese movimiento con la mano?
Esta mano también es tuya, no lo recuerdas?
Luego de lo cual se echó a reír a pata suelta por más de dos minutos, hasta que ingresé a la habitación y lo saqué del trance. El siguiente texto proviene de otra experiencia similar, al mes siguiente:
Quiénes son todas esas voces?
Relájate, solo somos tú.
Sólo yo? Y qué están haciendo aquí?
Eso es lo que te estamos preguntando.
Pero qué es lo que... me están preguntando?
Quién eres tú?
Yo, yo tenía un nombre, yo soy Abelardo...
Y?
Nada que hacer. No tiene sentido seguir conversando consigo mismo, qué opinas?
Sí, puede ser. Cuándo crees que todo tendrá sentido otra vez?
A esta altura ya no recuerdo... Cuántos crees que son allá afuera?
No lo sé. Sólo hagamos silencio, por favor. Sólo un momento.
Y en ese momento despertó.
De los reportes clínicos de N.L.
* El nombre real se mantiene en reserva
miércoles, julio 20
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