Como vi que están tocando el tema de la voluntad, el albedrío y esas cosas me pareció oportuno compartir con Reportes del Eter y sus lectores este poema que escribí en Altamar, cuando era un orgulloso punto en el océano y no ahora, que por un problema en la cadera soy un espectro en la ciudad.
Aníbal Veronelli, 89 años, navegante
El timón de la vida
Decidimos, sí, decidimos
¿pero cuándo decidimos
si decidir o no?
Decidimos, sí, pero
nunca decidimos
entre qué opciones elegir.
Todas las rutas que tomamos
nos llevan al mismo puerto.
Movemos el timón de un lado al otro,
pero siempre estamos en el ancho mar.
Decidimos, claro,
pero muy poquita cosa
porque me parece que todo
ya viene decidido de antemano.
nos llevan al mismo puerto.
Movemos el timón de un lado al otro,
pero siempre estamos en el ancho mar.
Decidimos, claro,
pero muy poquita cosa
porque me parece que todo
ya viene decidido de antemano.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario