CIENCIA
Ahora parece que uno de estos científicos o universidades norteamericanas cuyos trabajos tan frecuentemente cita Clarín, ha investigado sobre las neuronas "espejo" que se dedican a captar las "intenciones" de las acciones de los demás. Ya en una National Geographic había leido algo sobre una supueta zona del celebro encargada de conocer las intenciones del prójimo, lo cual la hacía catalogable como zona de "socializacion". Y en otro experimento pretendían demostrar que cuando un sujeto observa una escena, su cerebro la representa internamente tal cual como si él fuera el protagonista, lo cual le permite comprender posibles motivaciones e incluso sensaciones que el otro pudiere haber experimentade.
Sea como fuere el mecanismo cerebral, la cuestión es que ahora al parecer tenemos la capacidad de saber lo que los otros piensan. "Todos seríamos telépatas", podría titular Clarín. Pero por alguna razón, no queremos admitirlo. Sin embargo todos lo sabemos: sabemos que sabemos lo que piensan los demás, y que todos saben lo que pensamos, que nuestras cabezas son transparentes, que los pensamientos están ahí afuera. Jugamos como niños a cerrar los ojos para imaginarnos que no nos pueden ver. Pero aquí estamos, ya ya nos conocemos, y sería hora de que fuéramos poniéndonos las pilas.
sábado, mayo 7
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